Cómo lograr un matrimonio duradero: estas son las 3 preguntas clave que recomiendan los psicólogos
Consultar estas interrogantes de forma anual ayudan a mantener viva la conexión más allá de la rutina.

Cómo lograr un matrimonio duradero: estos son las 3 preguntas clave que recomiendan los psicólogos / Karl Tapales
Mantener el amor en el tiempo es un desafío que muchas parejas enfrentan. Con la rutina, las responsabilidades y los cambios personales, es común que las relaciones pierdan conexión.
Pero, según el psicólogo Mark Travers, no se trata de mantener viva una llama idealizada, sino de cultivar prácticas conscientes que ayuden a sostener el vínculo.
Más información

Según Forbes, el especialista en bienestar y relaciones presentó tres preguntas que pueden marcar la diferencia en matrimonios duraderos. Aquí te contamos cuáles son.
1. ¿Estamos creciendo juntos o solo coexistimos?
Con el paso de los años, el crecimiento personal puede ir en distintas direcciones. Esta pregunta invita a revisar si ambos miembros de la pareja siguen invirtiendo en conocerse.
Un estudio citado por Travers mostró que las personas con motivación intrínseca —es decir, que actúan por valores y pasiones personales— tienden a reportar mayor satisfacción conyugal, cercanía emocional y apoyo mutuo.
2. ¿Seguimos queriendo el mismo futuro juntos?
El amor no siempre se desvanece, pero sí puede cambiar el rumbo compartido. Según Travers, uno de los grandes riesgos en las relaciones largas es que las metas y prioridades dejen de coincidir.
Revisar en pareja, al menos una vez al año, los sueños, proyectos y necesidades de cada uno puede evitar frustraciones y fortalecer la alianza.
3. ¿Nos sentimos seguros incluso cuando discutimos?
El conflicto no es el enemigo: lo importante es cómo se gestiona. Travers resalta que las parejas duraderas aprenden a discutir sin dañarse.
La clave está en la escucha activa, el control de la intensidad, la comunicación sin culpas y el compromiso equilibrado.
Investigaciones indican que una mala gestión de los conflictos no solo afecta la relación, sino también la salud física. Incluso, hay dolores crónicos o trastornos cardíacos asociados a emociones mal reguladas.