Sernac denuncia estafa de automotora por no entregar autos para personas con discapacidad: cada vehículo costaba $14 millones
Consumidores acusan retrasos, fallas y falta de respuestas tras pagar por vehículos que nunca fueron entregados por la automotora HDR en Biobío.
El Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) en la región del Biobío denunció ante el Ministerio Público a la automotora HDR y Compañía Limitada por un posible delito de estafa y apropiación indebida,
Lo anterior luego de que consumidores acusaran la no entrega de vehículos adaptados para personas con discapacidad, a pesar de haber pagado cerca de $14 millones por unidad.
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De acuerdo con el Sernac, los afectados reportaron demoras de hasta un año en las entregas —cuando inicialmente se comprometieron a solo tres meses—, además de problemas como fallas mecánicas, falta de documentación, servicios no prestados y la retención de dineros en caso de desistimiento.
“Cada vez que los afectados intentaron resolver la situación, no habrían recibido una respuesta positiva ni tampoco la devolución de sus dineros”, indicó el organismo.
“Casos como estos no pueden quedar impunes”
Antes de acudir a la justicia, el Sernac realizó diversas gestiones para lograr una solución voluntaria, incluyendo la citación al representante legal de la automotora, quien no se presentó.
El director nacional del servicio, Andrés Herrera, sostuvo que “hemos remitido todos los antecedentes al Ministerio Público, ya que casos como estos no pueden quedar impunes”.
La directora regional del Biobío, Angélica Solar, explicó que buscan que se inicie una investigación penal: “El objetivo de esta acción es que el ente persecutor, con base en sus competencias, inicie una investigación penal y solicite las sanciones pertinentes, que pueden incluir penas de cárcel para la o las personas responsables”.
El Sernac fue enfático en señalar que este tipo de hechos no se enmarcan solo en un incumplimiento comercial, advirtiendo que “la Ley del Consumidor se hace cargo del incumplimiento de las empresas, pero no de delincuentes que se disfrazan de empresas para defraudar”.
