Bebés chilenos robados y enviados al extranjero: procesan a exjueza por red de adopciones ilegales durante la dictadura de Pinochet
Ivonne Gutiérrez, abogados y curas operaban una red de adopciones ilegales en plena dictadura. El país pide justicia. Y también el reencuentro.
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El caso que estremeció a Chile en 1983 vuelve a encabezar los titulares. La exjueza Ivonne Gutiérrez Pávez, acusada de encabezar una red de adopciones ilegales en San Fernando, fue procesada por la justicia chilena junto a otras cuatro personas.
La decisión marca un hito en la investigación de más de 1.300 casos de sustracción de menores durante el régimen cívico-militar de Augusto Pinochet.
La red operaba bajo el amparo de una estructura institucional: abogados, funcionarios del sistema judicial, sacerdotes y trabajadores sociales que facilitaban la entrega de niños a familias extranjeras, principalmente de Estados Unidos e Italia, recogió el País Chile.
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Según la investigación del juez Alejandro Aguilar, las madres, muchas de ellas adolescentes y en situación de pobreza, eran engañadas, presionadas o directamente despojadas de sus hijos.
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Una de ellas es Ruth Reyes, quien tenía 16 años cuando perdió a su hijo Alex. “Me dijeron que lo cuidarían mientras mejoraba mi situación, pero nunca volví a verlo”, relató al citado medio desde San Fernando. Su hijo fue enviado fuera del país sin su consentimiento, y su caso, el primero en denunciarse, ha esperado más de cuatro décadas para llegar a esta etapa judicial.
Gutiérrez, quien hoy reside en Israel bajo el nombre de Ivonne Bronfman, enfrenta cargos por asociación ilícita, prevaricación y sustracción de menores. Chile ha solicitado su extradición. El resto de los imputados, entre ellos su antiguo chofer y colaboradores de la red, se encuentran en prisión preventiva.
El procesamiento califica los hechos como crímenes de lesa humanidad, por lo que no prescriben.
