VIDEO. “No necesitamos pedirle permiso a nadie para existir”: Juicy Elektra y Diosa Drag Love iluminan la historia del arte drag en Chile
En conversación con Orgullo en tu ADN, las artistas reflexionaron sobre la evolución del drag chileno, sus inicios en la marginalidad y el poder de la visibilidad.

ADN / Ruth Cárcamo
Alguna vez fue clandestino. Silencioso. Ridiculizado o confinado a la noche. En bares oscuros y tras bambalinas precarias nacía en Chile una forma de arte que muchos aún no sabían nombrar, pero que gritaba con pelucas, plataformas y labios rojos: existimos.
Hoy, ese mismo arte se toma el Teatro Caupolicán en el corazón de Santiago con el DragFest, el evento drag más grande de Sudamérica. Y entre las estrellas que lo protagonizan están dos voces imprescindibles del escenario nacional: Juicy Elektra y Diosa Drag Love.
Ambas conversaron con el programa Orgullo en tu ADN, donde compartieron sus historias de transformación, resistencia y orgullo. Lo hicieron sin apuros, como quien entiende que cada palabra es parte de una revolución más grande.
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Un Chile que cambió
Juicy Elektra, de apenas 24 años, recuerda que se maquillaba a escondidas en su habitación cuando tenía 13. El espejo fue su primer público.
“Yo soy una mujer trans y en algún minuto viví como niño gay, y para mí era como un escape estar maquillándome, le robé las cosas a mi mamá. Lo hacía sola y eso me gustaba, y cuando conocí a Aja (participante de RuPaul’s Drag Race) dije: “Quizás esto pueda ir hacia un lado que se pueda trabajar”, relató.

ADN / Ruth Cárcamo
Actualmente, Juicy se define como artista, con una voz visible de una generación que ya no se disculpa por brillar. “Llegué en el minuto justo (...) A mí se me dieron las cosas, yo respetaba mucho esto, yo me instruí”, afirmó con la convicción de quien ha sobrevivido a una cultura que aún carga con resabios de intolerancia.
Diosa Drag Love, nacida en Argentina y radicada en Chile, comenzó su historia en la pista de baile de discotecas LGBTI+ en Córdoba, pero fue aquí donde su arte floreció. “Soy bailarina, actriz, acróbata (en tela). El drag me permitió unirlo todo. Es mi superpoder”, dijo entre risas.
Ambas coinciden en que ser drag en Chile no siempre fue glamour ni aplausos. “Hubo un tiempo en que las drag solo éramos parte de la bohemia, del circuito nocturno. Hoy nos invitan a matrimonios. Antes nos escondían y ahora nos llevan a sus cumpleaños, expresó Diosa. Y lo hace con la calma de quien ha visto cómo una sociedad entera puede cambiar cuando hay arte y visibilidad.
Drag como resistencia
“Cada vez que caminas por la calle en drag, estás haciendo una intervención urbana”, afirmó Diosa Drag Love. Y no es una metáfora vacía. Su sola presencia, colorida y magnética, desafía normas, incomoda prejuicios, y ofrece ternura y provocación a partes iguales.

ADN / Ruth Cárcamo
“Antes me daba mucho miedo, pero ese mismo miedo ha hecho que lo haga con más determinación. Un día tomé las riendas y salí así a darlo todo. Es muy liberador y es muy entretenido lo que pasa con las personas (...) el drag tiene mucho poder, simplemente bajar de nuestro departamento y cruzar a tomar un Uber, veo las caras de las personas, me cruzo a niñitas en los ascensores con la mamá y les cambia la cara", precisó la trasandina.
Para Juicy, el drag “ha significado todo”. “Da herramientas desde la vida y desde la calle (...) Al final es una expresión gigante, como desde hacer vestuarios, crear pelucas, crear el show, es muy bonito verlo. Yo lloro mucho por esto. A mí me emociona esto porque me hizo descubrir mi identidad trans, como que en un minuto dije: “Soy muy mujer”.
“En el mundo que estamos actualmente, la gente de derecha sabe que juega con lo poco letrada que son las personas. Hay gente que no tiene acceso a la información, y juegan con el miedo y presentan esto desde la bohemia y la perversión, y la gente que lo termina conociendo dice: “Esto va más allá de lo que se presenta. Esto es un arte, es una expresión”, reflexionó la drag chilena.
A eso, Diosa sumó: “El drag es tremendo aporte, en el contexto aquí estamos, estamos resistiendo (...) Hoy más que nunca tenemos que sentirnos más orgullosos de ser quienes somos, de celebrarnos, de no castigarnos porque en realidad si bien faltan muchas cosas en todos los países de Latinoamérica, no solo en Chile, para nuestros avances como comunidad, siento que el cambio es individual“.

ADN / Ruth Cárcamo
Una mirada al Orgullo
Cuando se les pregunta qué significa hoy el orgullo, Juicy responde sin dudar: “Este mes, también con lo que pasó con Francisco (Albornoz), también eso invita a reflexionar sobre lo que se vive de noche y hasta donde uno termina llegando a veces por la incomprensión de la familia, por los problemas sociales, por los problemas en el trabajo, por la forma en la que te mira la gente”.
“Vamos a existir y lo vamos a hacer siempre. Esto no va a terminar. Entonces, por las personas que lo pasaron tan mal en algún minuto y por las personas que vienen y que no queremos que las pasen mal, es por lo que nos debemos mostrar”, añadió.
Finalmente, Diosa Drag Love puntualizó en miras a la marcha del 21 de junio: “Ojalá que muchas personas en esta marcha se sientan muy orgullosos, porque en realidad eso es lo que necesitamos, que la gente no tenga miedo, porque en realidad no tenemos por qué tener miedo. Estamos en un buen camino y siento que hay que estar presente“.
El drag chileno ha mutado, como sus artistas. De la sombra al escenario. De la marginalidad a la celebración. Juicy y Diosa son prueba viva de que los tacos altos también sirven para escalar montañas.
“No nos tenemos que quedar calladas, no necesitamos pedirle permiso a nadie para existir”.