VIDEO. Desde el exilio a tocar con Ennio Morricone y Paul McCartney: la inspiradora historia de Mauricio Venegas-Astorga
Radicado en Inglaterra desde la dictadura, el músico chileno conversó con País ADN sobre cómo ha sido llevar la cultura andina a públicos europeos y refugiados de todo el mundo.

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Mauricio Venegas-Astorga dejó Chile tras el golpe de Estado de 1973 sin imaginar que la música transformaría su vida y lo llevaría a colaborar con íconos mundiales como Ennio Morricone, Paul McCartney y Hans Zimmer.
Hoy, radicado en Inglaterra, es un referente de la música andina y folclórica latinoamericana en Europa, gracias a un camino forjado entre la nostalgia, la resistencia y el arte.
“Yo salí de Chile no con el propósito de ser músico”, recordó Venegas-Astorga en conversación con País ADN. “Estudiaba tecnología en minas en la Universidad Técnica del Estado. Pero después del golpe, hubo que arrancar. En Argentina la situación era peor, y fue en Inglaterra donde, gracias a la solidaridad y las peñas, empecé a cultivar más la parte musical”.
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Allí nació el grupo Quimantú, cuyo nombre homenajea a la histórica editorial de la Unidad Popular. Con esta agrupación, Mauricio ha realizado giras por ciudades británicas, incluso involucrando a coros comunitarios y refugiados que interpretan en español una misa folclórica que expresa “el sufrimiento, la esperanza y la comunidad”.
“Nosotros no tocamos para el público latino, tocamos para los ingleses. Y ellos tienen una gran apertura hacia otras culturas. Incluso formamos un coro con refugiados de Siria, Irak, Colombia y Ucrania”, relató.
El reconocimiento no tardó en llegar. Participó en bandas sonoras de películas como Quantum of Solace y Las crónicas de Narnia, con sesiones grabadas en emblemáticos estudios como Abbey Road. “Morricone era un genio. Él nos pedía cosas imposibles con el charango, ¡necesitábamos cuatro manos!”, señaló.
“Vuelvo a mi útero”
Pese a tener dos patrias —como él mismo afirma—, su corazón sigue en Chile. “Yo vuelvo y caigo a mi útero, a mi mar. Me siento chileno. Este país (Inglaterra) me ha dado mucho, pero mis raíces están allá”.
Y concluyó con una reflexión: “Somos muchos los que, desde el exilio, seguimos aportando a Chile desde la cultura. A veces solo se acuerdan de nosotros para las elecciones. Pero seguimos aquí”.