Ni en papel aluminio, ni en una bolsa cerrada: esta es la mejor forma de guardar la lechuga para mantenerla fresca por más tiempo
Uno de los principales problemas de esta verdura es su corta vida útil. Revisa los tips para evitar que se marchite prematuramente.
Ni en papel aluminio, ni en una bolsa cerrada: esta es la mejor forma de guardar la lechuga para mantenerla fresca por más tiempo / wmaster890
Cuando se trata de ensaladas, la lechuga se destaca como una de las protagonistas.
Sin embargo, uno de los principales problemas que presenta es su corta vida útil.
A menudo, y muchas veces por un simple descuido, esta verdura se marchita dentro del refrigerador, sin dar la oportunidad de seguir disfrutando de aquella textura crujiente que completa diferentes comidas.
Revisa también:
Pero ojo, porque para evitar esto último hay que tener en consideración cuál es la mejor forma de guardarla.
De hecho, esto último podría marcar la diferencia y extender un par de días la duración.
¿Cómo se debe guardar la lechuga para no se marchite tan rápido?
Según explican distintos portales especializados en alimentos, la mejor forma de guardar la lechuga sigue siendo en el refrigerador. Eso sí, no se debe lavar antes de guardarla.
Lo ideal es dejarla en el propio cajón asignado para las verduras, debido a que ahí la temperatura y humedad del electrodoméstico se mantiene más estable.
Ahora bien, idealmente se debe conservar en un recipiente hermético no demasiado lleno o en una bolsa de plástico que esté perforada y que permita la circulación del aire.
Wachirawit Iemlerkchai
Si ya se cortaron las hojas, también se pueden dejar completamente secas en un recipiente con un papel absorbente en el fondo.
Lo que nunca se debe hacer es congelar la lechuga ni dejarla en bolsas plásticas sin ventilación.
En el primer caso, debido a su alto contenido de agua, la hortaliza es susceptible a la pérdida de textura y sabor. En el segundo, las bolsas selladas atrapan la humedad, lo que acelera su deterioro.
Los consejos adicionales incluyen revisar regularmente las hojas para retirar las que están marchitas y evitar que afecten al resto, así como mantener la temperatura del refrigerador a 4°C o menos para una conservación óptima.
