Este fue el testamento que dejó el Papa Francisco: detalla precisamente como quiere su sepultura
El documento, escrito en 2022 y revelado tras su muerte, refleja su fe mariana, austeridad y mensaje final por la paz y la fraternidad.

Este fue el testamento que dejó el Papa Francisco: detalla precisamente como quiere su sepultura / Vatican Pool
El Vaticano hizo público este lunes el testamento del Papa Francisco, fallecido a las 07:35 horas locales por un ictus cerebral. El documento, fechado el 29 de junio de 2022, revela la última voluntad del pontífice: ser sepultado en la basílica de Santa María la Mayor, en Roma, en una tumba modesta y sin ornamentos.
“Sintiendo que se acerca el fin de mi vida terrena y con viva esperanza en la Vida Eterna, deseo expresar mi voluntad sólo respecto al lugar de mi sepultura”, comienza el testamento. Francisco dejó constancia al decir: “Siempre he confiado mi vida y mi ministerio sacerdotal y episcopal a la Madre de Nuestro Señor, María Santísima”.
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Por esa razón, detalló: “Deseo que mi último viaje terrenal concluya precisamente en este antiguo santuario mariano donde fui a orar al inicio y al final de cada viaje apostólico para manifestar con confianza mis intenciones a la Madre Inmaculada y agradecerle su cuidado dócil y maternal”.
“Que el Señor conceda la recompensa”
En cuanto a los detalles del entierro, el pontífice pidió: “Solicito que mi sepulcro sea preparado en el nicho de la nave lateral entre la Capilla Paulina (Capilla de la Salus Populi Romani) y la Capilla Sforza de la citada Basílica Papal como se indica en el documento adjunto. El sepulcro debe estar en la tierra; sencillo, sin decoración particular y con la única inscripción: Franciscus”.
Los gastos funerarios serán cubiertos por un benefactor anónimo. “La suma del benefactor que ha dispuesto será entregada a Santa María la Mayor y de la cual he dado instrucciones oportunas a monseñor Rolandas Makrickas, comisionado extraordinario del Capítulo Liberiano”, indicó.
El testamento concluye con una oración y una intención final que reflejan el espíritu de su pontificado: “Que el Señor conceda la recompensa merecida a quienes me han amado y continuarán orando por mí. Ofrecí al Señor el sufrimiento que se hizo presente en la última parte de mi vida por la paz en el mundo y la fraternidad entre los pueblos”.