“Tiene los fundamentos de la vieja escuela con el dominio de la nueva era”: la joven estrella de baloncesto que es comparada con una leyenda de la NBA
Con 20 años, una figura del baloncesto universitario en Estados Unidos promete llegar a lo más alto de la liga.
Getty Images - Referencial / Sam Hodde
Cada cierto tiempo, los jóvenes universitarios logran sorprender al mundo y aparecer como firmes prospectos de cara al baloncesto profesional.
En la mayoría de los casos se trata de estudiantes estadounidenses que aspiran a llegar a las grandes ligas, como la NBA, apuntando al gran salto de sus vidas.
Asimismo, hay que remarcar que esto corre para ambos sexos, por lo que las mujeres tienen en mente firmar algún contrato con la WNBA (Women’s National Basketball Association).
Bajo este escenario, recientemente se comenzó a hablar de una joven jugadora que está captando la atención de todos los focos por su talento y su físico, llegando a ser comparada con una leyenda de la NBA.
Se trata nada más y nada menos que de Audi Crooks, que con apenas 20 años y una estatura de 1.90 metros, deslumbra al mundo con los Iowa State Cyclones y está dejando su huella en la NCAA.
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Considerada la mejor pivote del básquetbol universitario de los Estados Unidos, debido a su estilo y forma de juego, apoyada fuertemente en su fortaleza y altura, la comparan con Shaquille O’Neal.
Apodada ‘Lady Shaq’ por su dominio físico en la zona pintada y su juego de espaldas al aro, ya ha batido varios récords en su segunda temporada como basquetbolista universitaria.
Actualmente, promedia 23 puntos por partido y 7.7 rebotes en aproximadamente 29 minutos en cancha, con una efectividad en lanzamientos de campo cercana al 60%.
Desde su llegada a Iowa State, ha marcado hitos importantes. En su primer año, fue la máxima anotadora del equipo con 635 puntos, alcanzando un promedio de 19.2 por partido y superando la marca histórica de Megan Taylor, quien había anotado 460 puntos en la temporada 1997/98.
Además, logró anotar 40 puntos en un solo encuentro, una cifra que iguala a la estrella de la WNBA Brittney Griner, codeándose des muy joven con grandes nombres.
Icon Sportswire
Más allá de la cancha
Un punto a destacar es que el impacto de Audi Crooks no se limita a la cancha. Y es que su carisma la ha convertido en una figura atractiva para diversas marcas, siendo una figura importante también en la publicidad.
Sin embargo, su físico también ha sido tema de debate en redes sociales. Ante las críticas sobre su apariencia, Audi respondió con seguridad: “Puede que haya 100 comentarios sobre mi cuerpo o sobre mi aspecto, pero también hay 1.000 sobre mis habilidades, sobre mi carácter, sobre cómo sonrío y sobre cómo trato a los demás".
“Y si haces algún comentario, es porque me estás mirando. Encendiste la televisión para verme jugar y poder decir algo malo. Eso es increíble. Me encanta. Gracias por ser mi audiencia. Así lo veo yo”, aseguró en declaraciones a Marca.
Para potenciar su rendimiento, la Universidad de Iowa le diseñó un plan alimenticio especial que le permitió perder alrededor de 20 kilos, reduciendo su peso a 100 kg. Este cambio le otorgó mayor resistencia en cancha, aumentando su tiempo de juego de 10 a 26 minutos por partido.
Un talento de hoy con miras al futuro
Su impacto en la NCAA ha generado debate sobre si en el futuro podrá convertirse en una estrella de la WNBA. Para Kevin Garnett, exjugador de la NBA, el talento de Crooks es innegable y tiene un futuro prometedor.
“Tiene los fundamentos de la vieja escuela mezclados con el dominio de la nueva era”, comentó. Esto, mientras la joven sigue acumulando logros y mantiene su mirada fija en el sueño de llegar a la liga profesional femenina.
La pasión de Audi Crooks por el deporte no se limita al básquetbol. Proveniente de una familia con raíces deportivas (su padre jugó en Minnesota State), también ha brillado en otras disciplinas.
Fue campeona estatal en lanzamiento de bala y formó parte del equipo de voleibol de Iowa. Además, se destacó en el ámbito académico, estudiando derecho penal social y sociología, y desarrolló su talento musical en la banda y el coro de su escuela secundaria, donde tocó cinco instrumentos.
