Este es el pueblo más pequeño de Chile: está habitado por solo una familia
Descubre la historia de este lugar fundando hace más de 30 años.
Vivir en pleno desierto no significa dejar de trabajar arduamente. A 3.200 metros de altitud, en la región de Arica y Parinacota, se encuentra Mallku, un pequeño pueblo con solo seis habitantes, fundado hace más de 30 años por Alexis Troncoso y Andrea Chellew.
La familia Troncoso Chellew ha vivido en Mallku desde sus inicios. Alexis, oriundo de San Carlos y con estudios en escenografía en Milán, decidió alejarse de la ciudad y construir su hogar en la soledad del desierto. Andrea, quien dejó sus estudios de Medicina, lo acompañó en esta aventura.
Sin agua potable, electricidad limitada y sin televisión, la pareja construyó un invernadero para una alimentación autosustentable y comenzó a guiar turistas y profesionales interesados en la zona. Con el tiempo, lograron establecer el Café de Altura Mallku, un punto de encuentro para los visitantes.
Sus hijos, Mallku Tawapaca Wiracocha, Cristaria, Kael y Alaya Padmarani, nacieron y se educaron en la aldea, aprendiendo de sus padres y arqueólogos visitantes. Todos dieron exámenes libres y lograron completar su educación formal.
Una vida sin miedo a la soledad
“Vivir en el desierto es una oportunidad: uno explora, aprende observando. No se pierde la capacidad de sorpresa”, dice Mallku. Además, reflexiona sobre la soledad: “No le temo al silencio. Mucha gente en la ciudad está rodeada de personas y aun así se siente sola”.
Mallku sigue siendo un ejemplo de vida autosustentable en el desierto chileno, donde el espíritu de las montañas inspira a sus habitantes a seguir adelante a pesar de las dificultades.