Minera del Grupo Luksic realiza especial “contratación” de un ave rapaz para proteger sus instalaciones
Desde las 9:30 de la mañana, Ágata comienza su jornada en Minera Centinela.
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Minera Centinela
Desde las 9:30 de la mañana, Ágata comienza su jornada en Minera Centinela, cumpliendo un rol clave en la protección de las instalaciones.
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Sin embargo, no es una operaria ni una máquina, sino un peuco, un ave rapaz que fue incorporada para ahuyentar aves marinas que dañan la infraestructura.
Gaviotas, gaviotines monja y cormoranes habían convertido los techos y cables del sector de embarque en su hogar, generando corrosión y daños por la acumulación de fecas.
Para evitarlo, la minera del Grupo Luksic contrató a Ruta Rapaz, una empresa especializada en control biológico, que introdujo a Ágata en el área.
El método es simple, pero altamente efectivo: durante seis horas al día, Ágata realiza vuelos estratégicos junto a su adiestrador, estableciendo un hábito territorial que mantiene alejadas a las aves sin hacerles daño.
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Minera Centinela
Según explicó Cristián Vargas, gerente de Proyectos de Minera Centinela, el objetivo es que las aves marinas asocien el área como un territorio inaccesible y se alejen de forma natural.
Por su parte, Andrés Hernández, gerente de Ruta Rapaz, destacó que esta técnica ya ha sido utilizada con éxito en distintos puertos de la región de Antofagasta.