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Orquesta USACH e Inti-Illimani Histórico se unieron para dar vida a clásico chileno

La cantata ‘Canto para una Semilla’ de Luis Advis cerró la temporada de conciertos de la universidad estatal, en una emotiva jornada que incluyó también el Concierto para Cello Op.129 de Robert Schumann.

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Orquesta USACH e Inti-Illimani Histórico se unieron para dar vida a clásico chileno

Orquesta USACH e Inti-Illimani Histórico se unieron para dar vida a clásico chileno / Gary Go / Extensión USACH

Al haberse cumplido 20 años del deceso del recordado compositor y artífice de la conjunción entre música de tradición escrita y la Nueva Canción Chilena, Luis Advis (1935-2004), es notable constatar como su obra ‘Canto para una Semilla’, ha ido aumentando su presencia en el inconsciente colectivo local, casi equiparando a la recordada Cantata ‘Santa María de Iquique’ del mismo autor.

Precisamente en conmemoración de este aniversario la obra con que Advis homenajeó a Violeta Parra, musicalizando sus Décimas, sirvió como broche de oro de una temporada que en su totalidad fue de las emocionantes e interesantes en Chile de este año. Y todo de la mano del director titular, David Del Pino Klinge, quien empuñó la batuta en este concierto final.

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Gary Go / Extensión USACH

En la primera parte se interpretó el dramático y sensible Concierto para Cello Op.129 de Robert Schumann. Compuesto durante los últimos años del compositor, su calidad lírica encontró una intérprete sensitiva en María Gabriela Olivares, primer cello de la orquesta. En vez de desmedida pirotecnia romántica, hubo de su parte un hermoso canto expresivo sin límites, acompañada de forma complementaria por la orquesta.

El breve movimiento lento central contó con la voz añadida del violonchelo de la orquesta, acompañado por un suave pizzicato. El brillante final, que incluye una cadenza acompañada, resultó el último golpe del compositor antes de su descenso terminal a la locura, y acá la poética interpretación de Olivares transmitió una sobrecogedora emocionalidad.

En cuanto a ‘Canto para una Semilla’, cabe notar que el legendario Inti-Illimani surgió precisamente de la USACH, lo que añadió más ingredientes emocionales a lo que constituyó un momento de enorme simbolismo en este cierre de temporada. La actriz Carolina Carrasco fue la recitante, mientras que las solistas vocales fueron Elizabeth Morris y Colombina Parra, sumando el crucial rol del Coro Sinfónico USACH (director: Andrés Bahamondes).

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Gary Go / Extensión USACH

El conjunto que dirige Horacio Salinas ha montado esta obra en numerosas ocasiones, por lo que huelga decir que la entregan siempre certeramente. El trabajo de las solistas resaltó el material, produciéndose momentos electrizantes. Uno fue “El Amor”, donde brilló la sensible voz de Morris, que cabe notar que ella misma es una cantautora excepcional por derecho propio.

Parra, en tanto, le imprimió una actitud rockera a “La Denuncia”, mientras que la sentida “El Compromiso” fue el turno de lucimiento para la voz profunda de José Seves, otro de los miembros históricos del grupo, tal como el charanguista Horacio Durán.

Pero esta no fue una interpretación más de esta querida obra. Lo vívido en el Aula Magna USACH constituyó una versión magnificada de la partitura. Y de eso es responsable el maestro Del Pino, cuyas interpretaciones se caracterizan siempre por su compromiso, su entrega, su energía, su visión. Dirige cada pieza que tiene en su atril como si fuese la Novena de Beethoven, y eso lo transmite al público. No es de extrañar que las últimas temporadas de la Orquesta USACH han resultado tremendamente exitosas.

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