Actividad económica en Argentina cae 3,3 % en septiembre y acumula cuatro meses de retroceso

La actividad económica en Argentina registró en septiembre una caída interanual del 3,3 %, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). Este resultado marca el cuarto mes consecutivo de contracción, reflejando un escenario de desaceleración que también se traduce en una retracción del 0,3 % respecto a agosto.

La caída de septiembre se produjo en un contexto de inflación interanual del 209%, un fuerte ajuste fiscal implementado por el gobierno de Javier Milei y un consumo que, aunque continúa en retracción, mostró una disminución menos pronunciada que en la primera mitad del año.

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El informe del Indec destacó que cuatro de los 16 sectores medidos lograron un crecimiento interanual en septiembre. La agricultura, uno de los pilares de la economía argentina, creció un 3,1 %, mientras que la minería lideró los avances con un 7,6 %. También registraron alzas la actividad financiera (+2,5 %) y la enseñanza (+0,4 %), señala la agencia EFE.

Sin embargo, el impulso de estos sectores no logró compensar las caídas en actividades clave. Entre las más afectadas se encuentran la construcción (-16,6 %), el comercio (-8,3 %) y la industria manufacturera (-6,2 %), las cuales tuvieron un impacto significativo en el resultado general.

Acumulación de retrocesos en 2024

En el acumulado de los primeros nueve meses del año, la actividad económica argentina retrocedió un 3,1 %. Este desempeño está en línea con las proyecciones privadas recopiladas por el Banco Central, que estiman una caída del Producto Interno Bruto (PIB) de un 3,6 % en 2024, tras una contracción del 1,6 % en 2023.

Para 2025, las expectativas son más optimistas. El gobierno de Milei anticipa una recuperación vigorosa del 5 %, mientras que los analistas privados proyectan un crecimiento más moderado, del 3,6 %. Estas cifras reflejan un posible cambio de tendencia, aunque dependerán de la efectividad de las medidas económicas aplicadas y de la estabilización de variables críticas como la inflación y el consumo.

La actividad económica en Argentina sigue enfrentando desafíos significativos, con sectores estratégicos aún en retroceso, aunque algunos brotes de recuperación sugieren un posible cambio de rumbo en los próximos años.