Marcianeke y sus días limpio de drogas en el reality de Canal 13: “Lo que más me interesaba era dejar de lado las adicciones”

El nuevo reality de Canal 13, Palabra de honor, se estrenó este domingo con una temática militar que exige a sus participantes una estricta disciplina y resistencia física. Entre los concursantes destaca el cantante urbano Marcianeke, cuyo nombre real es Matías Muñoz, quien rápidamente capturó la atención en el primer episodio, no solo por su actitud desenfadada sino también por su voluntad de adaptación a las exigencias del encierro.

El programa, ambientado en Lima, Perú, representa un desafío para los participantes, quienes viven bajo reglas de una especie de “reformatorio militar”. El cantante del género urbano llegó acompañado de su pareja, Anaís Vilches, con quien retomó su relación este año tras dos años de separación.

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Desde el inicio, Matías se ha esforzado en cumplir con las pruebas del reality, como el salto en paracaídas, una de las primeras tareas asignadas. “Nunca pensé en adaptarme tan rápido”, expresó el joven a LUN al comentar sobre su experiencia. “Siempre he sido disciplinado para mis cosas, pero me resultó fácil desde el día uno, mientras que fue difícil para muchos. Creo que marqué la diferencia, y fue con pura disciplina. Esto es solo disciplina y sobreexigirse, nada más”, agregó.

Para el joven artista urbano, la participación en “Palabra de honor” no es solo una competencia, sino una oportunidad de crecimiento personal y de alejarse de problemas del pasado. “Ya antes de entrar estaba enfocado en ser un nuevo Matías. Me tenía aburrido el hate (odio en redes sociales), las consecuencias, por culpa de eso he tenido pensamientos de arrebato, que los he cometido igual”, reveló.

Quiere dejar en el pasado su adicción a las drogas

Para Marcianeke, uno de sus principales objetivos al ingresar al reality es “dejar las adicciones, saber lo que es botar el estrés, las ansiedades de otra forma y no refugiarme en cosas que, por muy fuerte que seas, son tu debilidad. Orgullosamente, llevo una semana limpio, lo que no me pasaba en meses, y estoy orgulloso de mí mismo porque no he extrañado tanto la droga como afuera”, confesó.

Tras ello, el cantante del género urbano también subrayó que su meta es salir del encierro con la capacidad de rechazar las tentaciones cuando regrese a su vida cotidiana. “Esto me sirve para salir más preparado y ser cada vez más capaz de decir que ‘no’ afuera. Más que fuerza de voluntad, es fuerza de mente, y me siento orgulloso de mí mismo”, declaró.

Al ingresar al reality, había pensado que su resistencia sería limitada, pero ahora está dispuesto a mantenerse hasta donde sus fuerzas lo permitan. “Entré con la certeza de aguantar dos semanas, y cada vez nos hemos adaptado más, así que queremos sobreexigirnos y ver hasta dónde llegamos. Que sea lo que Dios quiera, la fuerza que me dé”, comentó.

En lo físico, Marcianeke también ha tenido que esforzarse al máximo. “Tengo todas las piernas rasmilladas y aun así quiero seguir compitiendo”. Y luego, agregó: “He recibido muy buenos comentarios de gente que no pensé que iba a sorprenderse tanto de mí, gente que no me conocía”.

Además, su convivencia en el reality ha sido mejor de lo que esperaba, ya que Matías expuso que “me he llevado bien con todos, hasta con los que no pensaba que me iba a llevar bien”.