Un correo enviado el 1 de mayo de 2020 se convirtió en una de las pruebas centrales presentadas por Lorena Vargas en su acusación contra su expareja, Sebastián “Cuchillo” Eyzaguirre. El mensaje refleja un tono amenazante por parte del comunicador, quien resultó condenado por el delito de maltrato habitual.
“Ya que te diste el lujo de bloquearme, decirte que quiero un mail por escrito mañana mismo, reconociendo la deuda que tienes conmigo con fecha de hoy y con fecha máxima de pago al 30 de junio (agradece que soy generoso)”, exigía el expanelista de CQC en el mail.
“Si mañana no tengo ese email de reconocimiento y no te comportas a la altura en los plazos y el pendiente, me vas a conocer. Así que no me hagas ir más allá. No creo que te convenga. Y te lo digo muy en serio. Ojalá te quede claro”, añadió.
La insistencia de “Cuchillo” Eyzaguirre
Este mensaje es solo uno de los muchos intercambios que Lorena Vargas presentó en la denuncia contra el expresentador televisivo, quien resultó condenado por el delito de maltrato habitual, y que fueron mostrados en conversación con CHV Noticias.
Según la exnotera de CQC, estos correos y audios comenzaron a llegar después de que ella abandonara el departamento en el que ambos vivían juntos durante la pandemia, una salida que, según afirma, no fue voluntaria, sino que se habría debido a una agresión de “Cuchillo”, quien la expulsó del lugar.
“Me empezó a gritar, por la escalera, alcancé a agarrar con suerte las llaves, porque me empezó a empujar para sacarme del departamento. Esto ya era el horario de toque de queda y me tiró para fuera del departamento”, aseguró la víctima.
Otro correo enviado por Sebastián Eyzaguirre también muestra su insistencia: “Ya que me bloqueaste, contéstame el email que te mandé, que es bien formal y es bien claro frente al único tema pendiente que tenemos”. Pero las presiones no se limitaban a los correos electrónicos.
El expresentador televisivo también utilizó mensajes de audio para insistir en su demanda. “Contéstame el mail, si no querís verme caliente en serio y ver hasta dónde puedo llegar contigo. Es lo único que te digo, porque tenemos un temita pendiente”, se escucha en uno de los audios presentados como evidencia.
En la entrevista, Lorena Vargas detalló cómo estos correos y mensajes se convirtieron en una constante en su vida, describiendo cómo la situación empeoraba con cada nuevo mensaje. “Ahí seguía con los correos, uno tras otro, uno peor que otro”, relató.
La situación que empeoró todo
Sin embargo, fue en octubre de 2020 cuando la situación alcanzó un punto crítico. La víctima y expareja de Sebastián Eyzaguirre mencionó un incidente particularmente grave, aunque no especificó los detalles debido a la cercanía de la persona involucrada.
Este evento, según ella, marcó un antes y un después en su relación con el expanelista de CQC. Ante este episodio, el expresentador televisivo respondió con un audio en el que afirmaba: “Esto es lo más fuerte que me ha pasado en mi vida. ¿Cómo se te ocurre acusarme de una hueá así?”.
En el mismo mensaje, agregó: “Es lo más grave que me han dicho en toda mi vida, pero ni de rodillas, hija de puta, te voy a perdonar esta hueá que hiciste. Ni de rodillas. Te espero donde queraí, en un tribunal o donde querai, hija de puta. Esta sí que no te la voy a aguantar”.
Finalmente, Lorena Vargas recordó cómo la situación escaló aún más después de este incidente, con Sebastián Eyzaguirre enviándole más correos y encontrándose con ella en un supermercado, seguido de una aparición en su edificio.
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