La NBA busca que el All Star Game sea más competitivo y surge una interesante discusión
Fanáticos y directivos esperan ver más emociones en la cancha, aunque no todos los jugadores comparten la idea.
El pasado fin de semana se celebró el NBA All Star Game 2024, dejando varios momentos destacados para analizar y poder disfrutar el primer nivel del baloncesto.
Dejando de lado el show del Celebrity Game y el Rising Stars Challenge, la acción llega a su máximo esplendor con los siempre interesantes concursos de talento y competencias de triples y volcadas.
Después de aquello viene el que debería ser el broche de oro con el Juego de las Estrellas. Sin embargo, hay que reconocer que se vive un bajón respecto de las emociones.
A pesar de que sean los mejores jugadores actuales de cada Conferencia los que salen a la cancha, el nivel de juego no es el esperado.
Si bien en esta 73° edición el All Star se dio un nuevo récord de anotación en el marcador final de 211 - 186 (a favor del Este con el Team Giannis), esto no es otra cosa que el reflejo de un partido sin mucho roce.
Claramente las defensas son más bajas, no hay un gran esfuerzo físico y las estrellas se dedican más bien a divertirse experimentando jugadas vistosas.
¿Hay que hacer cambios?
Frente a este panorama, los directivos de la National Basketball Association, apoyados por el deseo de los adicionados, apuntan a elevar la competitividad del All Star Game.
Este evento es ampliamente promocionado y vendido como un espacio único para deleitarse con el mejor básquetbol del mundo, pero su final pareciera no estar a la altura e incluso traspasa cierto desinterés de los participantes.
Un ejemplo de la poca intensidad que se vive son las faltas cometidas en el Game. Este año solo se cobraron tres fouls, exagerando la baja en los últimos años y poniendo sobre la mesa la discusión de cómo revivir la llama.
Sin embargo, es difícil hacer que los jugadores se interesen de tal manera que vean el partido como una competencia importante y tengan un desempeño similar a lo que hacen durante la temporada.
Por una parte, y siendo muy entendible, es complicado y exponerse a lesiones que pueden afectar las ambiciones personales y objetivos centrales que cada uno tiene con su equipo. Esto, considerando que es un descanso y parón del torneo principal.
Esto lo expresó el All Star Anthony Edwards respondiendo ante quienes piden más competitividad, diciendo que es muy probable que “Nunca lo vea como algo super competitivo. Siempre es divertido”.
“No sé qué pueden hacer para hacerlo más competitivo. Es un descanso. No creo que nadie quiera venir aquí y competir”, complementó?
¿Y el incentivo económico?
Bien se sabe que en la NBA se mueven grandes sumas de dinero y hay pago por casi todo. El All Star no es la excepción, pero sí está muy por debajo de los montos que se suelen manejar.
Según indica The Athletic, los jugadores reciben $25 mil dólares por participar en el evento. En tanto, los ganadores se llevan $75 mil extra.
Pero hay que tener en cuenta que el All Star peor pagado en la liga, Tyrese Maxey, gana $4.3 millones mensuales. El resto llega a cobrar incluso hasta 12 veces más.
Esto quiere decir que el monto que se da por el Juego de las Estrellas significa solo un 1,7% del salario base, y ni hablar del porcentaje ínfimo que es para el resto.
Habrá que ver de qué manera los directivos podrán hacer que el NBA All Star sea más competitivo, pero logrando el equilibrio entre motivar a los jugadores y dejar conforme a los fans.