Para no perjudicar a personas con TEA y a animales: Pichilemu celebrará Año Nuevo sin fuegos artificiales

En contraste con muchas comunas que planifican un espectáculo de fuegos artificiales para celebrar el Año Nuevo, Pichilemu, un tradicional balneario ubicado en la Región de O’Higgins, ha decidido abstenerse de realizar este tipo de evento. La medida se enmarca en la preocupación por el impacto ambiental de los fuegos artificiales, así como en el deseo de proteger la salud de las personas con trastornos del espectro autista (TEA).

El municipio de Pichilemu ha anunciado que no llevará a cabo un espectáculo pirotécnico durante la celebración de Año Nuevo. La decisión de que no haya fuegos artificiales se basa en diversos motivos, entre los que se encuentran la contaminación que generan, los riesgos de accidentes por quemaduras y el malestar que causan en personas con TEA. Además, se destaca el impacto estresante que estos eventos tienen en la fauna local.

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La alcaldía de Pichilemu ha manifestado su compromiso con la protección del medio ambiente y la seguridad de los ciudadanos. En una época en la que los incendios forestales son una preocupación constante en diversas zonas del país, la decisión de evitar los fuegos artificiales se alinea con la precaución y la responsabilidad ambiental.

“Los fuegos artificiales son muy contaminantes para: las personas, animales, aves, humedales, océanos y atmósfera. Las personas con trastornos del espectro autista (TEA) no toleran los ruidos de alto impacto. Los animales tienen el oído más sensible que el humano y sufren con las explosiones de pirotecnia. Celebremos el Año Nuevo sanamente, sin fuegos artificiales”, expuso la Municipalidad de Pichilemu en un video promocional.

En línea con campañas gubernamentales y de grupos animalistas

La campaña “Año Nuevo Seguro”, lanzada recientemente en Santiago, busca prevenir el uso y manipulación de fuegos artificiales debido a los riesgos asociados, incluyendo quemaduras y accidentes. Las autoridades de Pichilemu, al tomar la decisión de no realizar el espectáculo pirotécnico, refuerzan el llamado a evitar situaciones que puedan comprometer la seguridad de la comunidad.

Además de las preocupaciones ambientales y de seguridad, grupos animalistas también han abogado por la restricción de los fuegos artificiales, destacando cómo estos afectan negativamente a las mascotas, generando crisis de pánico y, en algunos casos, incluso provocando la muerte de animales.

Pichilemu, conocido por sus hermosas playas y bosques, es reconocido como un destino turístico destacado en la Región de O’Higgins.