Una difícil situación vive el Conservador de Bienes Raíces de Santiago (CBRS), tras la llegada del nuevo conservador de Hipotecas, Carlos Miranda, quien llevó a la justicia a los sindicatos de trabajadores a fin de impugnar el contrato colectivo que concretaron con la institución. Según consignó un reportaje de La Tercera, Miranda busca eliminar que las agrupaciones se opongan a la contratación de nuevos funcionarios. De acuerdo con algunos trabajadores, la negativa de los sindicatos surge porque no quieren que sus sueldos se repartan. Debido a esta intención de “modernizar” el CBRS, Miranda ha sido acusado por estas agrupaciones de desconocer el derecho adquirido de los trabajadores, y mantuvo una pugna con Luis Maldonado, histórico conservador del Registro de Propiedades, Comercio y Agua, quien representa la “vieja escuela”. La presidenta del Sindicato Nº2, Maggi Bustos, afirmó al medio antes mencionado que “a lo que nos oponemos son a las contrataciones discrecionales o que no tienen una justificación técnica”. Sin embargo, un trabajador del CBRS -que pidió reservar su identidad- acusó que los sindicatos se oponen porque “¡son todos parientes!, por eso no quieren que lleguen nuevos funcionarios”. Para evidenciar lo anterior, se tomó como ejemplo a la familia del presidente del Sindicato Nº1, Pablo Vargas, ya que este trabaja en la institución junto a su padre, hermano y esposa.